CUMPLIENDO AÑOS

Hoy cumplo sesenta seis años y no soy lo que pensé que sería, pero soy más de lo que pensé que pudiera ser, y que ahora sé, que son los años los que hacen las historias, que la experiencia da más fuerza que la juventud, que las arrugas no son escamas, que son las huellas del tiempo, que he roto muchas suelas de zapatos en este largo caminar, pero mis pisadas se están volviendo cada día más fuertes, porque he aprendido que no hay huellas sin pasos, que se cosecha después de sembrar, que no hay noches sin sus días y no habrá victoria sin derrota, ni vida sin el pasar de los años.

Siempre pensé que hay que vivir para llegar a vieja, y si no llego a ser vieja, es, porque me quedé en el camino, así que aceptaré el paso de los años, como el camino para llegar a la meta que la vida me puso el día que nací.

Y que solo yo, soy la culpable de mi destino, porque también aprendí con el pasar de los años a no culpar a nadie de mis errores, y que compartir no es solo recibir, es dar 
Pero para llegar a toda esta reflexión he tenido que cumplir 66 años jajaja… cuando tenía 18 años nada más tenía juventud.