martes, 20 de diciembre de 2011

Tus ojos

Tus ojos

En tus ojos se posó la noche
con azabaches de perlas
fueron dos negros tizones
que ardían en mi con fuerza

La noche hace palacios
para albergarlos en ella,
en los espacios redondos
debajo de las dos cejas

Balaustradas de pecados,
dragones, que fuego llevan,
que pintaron en tu rostro
para siempre la belleza.

Ojos negros espectadores,
de ébano y mirada negra.
Mendigos y palaciegos
con pestañas de palmeras.

Oasis son en desiertos,
de enigmática belleza.
Y tú mirada envolvente
territorios de poeta
Carmen Pacheco 

domingo, 18 de diciembre de 2011

La luna

La luna


Galopa por cielo de azabache
la luna con crines plateada
Desnuda amazona de la noche
con su blanca imagen fulgurada.

La sierra entre sombras, muda, espera
inquieta el cortejo de su amada,
con miles de abrazos enramados
suspirando amor por su llegada…

El viento, celoso de su vuelo,
se agita lanzado dentellada
silbado su canto sibilino
de amante con alma derrotada.

En su coqueto vuelo, la luna,
juguetea y danza en la alborada
y se ofrece en sacro sacrificio
al mar de sus sueños, abrazada.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Nanas de caracolas

Con nanas de caracolas 
la mar le canta a mi niño.
Sabanas de playa y olas
lo arropan con su cariño.


Duérmete tesoro mío
que la noche va llegando
y tu carita morena
la luna la está mirando

Sonajeros de corales, 

y salobres besos de aguas.
La mar meciendo a mi niño,
en cuna de verdes algas.

Sueña mi niño chiquito
y haz tu castillo de arena
con sus torres de esperanza 
y sueña, mi niño, sueña…
Carmen Pacheco

martes, 6 de diciembre de 2011

LA LOCA DEL CARMEN

(BASADA EN UN HECHO REAL )

Vestida de colorines
con un cesto en el brazo.
Carmencilla “La rosales”
iba llorando y cantando.

Es de dolor su locura
su corazón se ha quebrado:
Una carta llego del frente,
porque a su hijo mataron.

En el fondo de su cesta
entre collares y lazos
arrugada y escondida
la guarda para olvidarlo.

Que nadie toque sus cosas
pues te araña como un gato.
Por que si viera la carta
su lucidez es quebranto.

Si encuentra a una enlutada,
se acerca a ella gritando.
¿Porqué te pones de negro?
¡¡ El negro es un color malo!!

Avíos para escribir,
va pidiendo y suplicando.
¡Anda escríbeme a mi niño¡
Yo no sé de garabatos.

Ponga usted la pesetilla
“pa” que tenga “pa” tabaco
y el sellito de correo
su sobre y el papel blanco.

Mi niño sabe escribir
pero el no puede comprarlo.
Ande, haga usted el favor…
que mi carta esta esperando.

Carmencilla “La rosales”
con la carta entre las manos
caminado hacia correos
va, con su locura de años.

¿Cartero lleva usted carta?
¿Cartero no la habrá olvidado?
y el cartero por piedad
le da, ese sobre cerrado

Y dentro lleva una carta
llena de unos garabatos.
Los agentes de correos,
van su dolor mitigando.

Léame usted esta carta
que del frente me ha llegado.
Y Manuel el de la tienda
se inventa cualquier relato.

En su locura, la Carmen,
la aprieta fuerte en sus manos.
Como un hermoso tesoro
se la guarda en el regazo.

En la caseta del Carmen,
rodeada de sus gatos,
va viviendo su locura
y ella, a nadie le hace daño.

Se viste de colorines,
lleva collares y lazos.
Así esconde su dolor,
para poder soportarlo

Su único hijo esta muerto
sin ni siquiera abrazarlo.
Y para aguantar la pena
habla de él, con los gatos.

Lo chiquillos la abuchean
por su estilo estrafalario
y ella ríe muy contenta,
a sus risas coreando.

Y enseña una vieja foto
de aquel guapo miliciano,
arrugada y amarilla
por el paso de los años.

Su cara con coloretes
de rojo carmín los labios,
los collares y las flores
los volantes y los lazos.

Es el bálsamo que tiene
para borrar tanto espanto.
El que perturba su mente
porque no puede aceptarlo.

No se que paso con ella,
si puso fin a su llanto.
Pero mis ojos de niña
siempre su imagen guardaron

Carmencilla " La Rosales"
entre flores y entre gatos
tu locura compartías
como un bendito regalo.

Quedando en mi corazón.
tus locuras y tu llanto
tu historia se hizo cercana,
y nunca pude olvidado.

Carmen Pacheco Sánchez
Cazalla 2005

jueves, 1 de diciembre de 2011

Pintura al oleo de Carmen Pacheco
(Bodegón)
LA GUITARRA
El flamenco y Andalucía

La noche se hace gitana,
con tono de piel canela.
Andalucía llama al cante,
el cante, con ella sueña.

Rasgueando la guitarra,
entre las blancas callejas
embriaga con sus sonidos,
sonidos, de cal y piedra.

El flamenco con su duende…
Al aire de aromas impregna.
Embruja los sentimientos,
suspiros… que al alma llegan

La Toná, La Seguidilla,
Bulería, Petenera;
Las Zambras y La Granaínas
El Tango y La Bambera.

 La Milonga, La Liviana,
Las Tarantas, y La Debla,
Colombianas y Guajiras,
Farrucas, Cartageneras.

 Los Tientos, El Martinete,
Caracoles, Carceleras
Alegrías, El Zorongo,
Polo, La Caña y Galera

 El Garrotín, La Cantiña,
 Verdiales, Malagueña.
La Rumba, La Soleá.
Los Fandangos, La Saetas…

 Desde Jaén a Granada,
por Almería y Huelva.
Desde Cádiz a Sevilla,
Málaga y Córdoba la bella

El Flamenco se hace vida
se hace magia y belleza.
Con su ritmo y alegría
 De notas sentías y lentas.

Va, recorriendo caminos
y desde la mar, a la sierra.
Un  duende lleno de magia
De sentimiento y belleza

Se adueña del sentimiento
de la gentes de mi tierra
Y su duende y sentimientos
de esta tierra, se adueña.

Zapatean unos pies.
Un mantón el aire lleva,
que prendió entre los flecos
por el tablao, voletea.

 La guitarra, se hace… cante.
Un “quejio” entre sus cuerdas.
Y la noche se vuelve gitana.
Gitana noche… Flamenca.